Pérez Bueno también ha destacado los avances logrados en las últimas décadas en materia de accesibilidad pero ha insistido en que la situación actual “no es satisfactoria” ya que, en palabras del presidente del CERMI “el objetivo de la accesibilidad universal al transporte está aún lejos tanto en España como en Europa”.

 

El presidente también ha hecho hincapié en los efectos negativos de la crisis y la austeridad económica y como ésta se “invoca” no solo para “no avanzar” sino también para “retroceder” en materia de accesibilidad. Por ello, Pérez Bueno ha sentenciado que la inversión en accesibilidad “genera negocio”, ya que gracias a esta “más gente podrá viajar y más demanda existirá”.

 

En este sentido, el presidente del CERMI ha afirmado que, en general, España se encuentra en la parte “media/alta” de la clasificación europea en materia de accesibilidad pero que ésta “es desigual y discontinua, en función del medio de transporte y del territorio”.

 

Según Pérez Bueno, el autobús es el medio de transporte con una mayor accesibilidad, aunque ha señalado que este lo es “en un grado mejorable pero aceptable”. No obstante, el presidente del CERMI cree que las leyes no garantizan un transporte urbano lo suficientemente adaptado y señala que las normativa nacional, autonómica y local a este respecto es en muchos casos “contradictoria” lo que esboza “un panorama francamente mejorable”.

 

Con respecto a las ayudas económicas aprobadas por el Gobierno para la renovación de flotas, Pérez Bueno ha insistido en la necesidad de apoyar con recursos  también, desde los poderes públicos, a los operadores privados, para que estos transformen sus materiales y procesos y mejoren en accesibilidad. “Reclamamos líneas de ayudas para que los empresarios lo tengan más fácil para migrar de elementos de transporte excluyentes a otros inclusivos” dijo el presidente.